Una poderosa frase de Antoine de Saint-Exupéry
Cada vez que termina un año nos esmeramos para alcanzar nuevas metas. Me las puse en el 2019, para este año 2020, y a pesar de la pandemia, cumplí cada una de ellas, a nivel profesional y personal. ¿Cómo lo logré? Todo esto es posible si disponemos de un plan, un plan realista, de corto plazo, para llegar a esa meta final de largo plazo. Cada logro se celebra, y es ésta, la que te da más energía para seguir adelante. Aún tengo mucho camino por recorrer, pero aprendí durante este año que hay que darle tiempo a todo, y que Dios tiene un plan para cada uno de nosotros.
Todos queremos emprender, crecer, y ser los mejores. Para lograrlo no solo debes desearlo, tienes que poner ACCIÓN, las cosas no se hacen por sí solas.
Aún no se acaba el 2020, pero es buen momento de pensar, cuales son mis metas de manera empresarial, como por ejemplo: aumentar mis ventas, tener un local comercial, o ser una empresa sostenible. Para lograr estas metas, ¿qué cambios debo hacer? Cambiar mi estrategia de venta, cambiar mi imagen corporativa, cambiar mi empaque o remodelar las oficinas. Recuerda que tus objetivos deben ser realistas.
Transforma tus deseos en una realidad!